Rubia tetona seduce a su compañera de cuarto en el lavadero
Una rubia lleva un mes viviendo con su nueva compañera de piso. Él la pone de los nervios pero también la excita mucho. Ella estaba lavando la ropa y él entró en la habitación. Ambos intentaban meter la ropa en la lavadora al mismo tiempo, pero ella quería ir primero. La rubia se quitó la camiseta y la metió en la lavadora. La compañera de cuarto vio muy bien sus grandes tetas en sujetador. Ella lo vio mirándose los pechos y sonrió. En broma, ella lo miró y le pidió que la ayudara a quitárselo. Ella realmente tenía una hermosa pareja y rogaron ser liberadas. Le quitó el sostén y le encantó ver sus tetas desnudas frente a él. Sus magníficas tetas quedaron libres y su polla se sacudió al ver esas bellezas. Inmediatamente enterró su rostro entre sus melones y ella lo abrazó con fuerza. Comenzó a besar y chupar sus tetas. La chica también se bajó las bragas. Estaba completamente desnuda y él vio su bonito y afeitado coño. Se arrodilló en el suelo entre sus piernas y empezó a lamerlo. Una nena tetona desnuda estaba frotando su coño de un lado a otro en su cara. Estaba lamiendo con la lengua, arriba y abajo, de lado a lado, dentro y fuera. Decidiendo darle lo que quería, finalmente se bajó los calzoncillos para liberar su polla ahora dura como una roca. Se arrodilló y se lo metió directamente en la boca. Era grande y le encantaba su sabor. Ella se lo chupó antes de meterlo dentro de ella. Su coño era cálido y acogedor. La tenía por detrás y la estaba clavando duro en ese cuarto de lavado. Él se acercó y agarró sus suaves tetas con ambas manos, acunándolas y acercándola a él mientras ella comenzaba a empujar su gran trasero contra él. Ella gritaba y gemía mientras su polla destruía su coño. Le encantaba jugar con sus tetas mientras la follaba. La tenía en cada rincón de la habitación. Él estaba en el suelo y ella se puso encima de él. A ella le encantaba montar su polla. Sus tetas saltaban arriba y abajo mientras cabalgaba. Quería correrse sobre ellos, así que cuando se acercaba a terminar, salió de ella. Sus pelotas estaban listas y roció sus grandes tetas con su esperma.